- 1/2 taza de salsa de soja (baja en sodio)
- 1/4 taza de Sake
- vino japonés de arroz
- 1/4 taza de Mirnvino dulce de arroz
- 1 cucharada de vinagre de jerez
- 2 cucharadas de azúcar
- 2 dientes de ajo picados
- 3 cm de jengibre pelado y picado
- 2 manojos de cebolletas tiernas
- 1 cucharadita de maicena
- 1 kilo de muslos de pollo deshuesados y sin piel cortados en trozos de 5 cm
- aceite de oliva
- 1 cucharada de semillas de sésamo tostadas
- maderas para brochetas
ELABORACIÓN:
Cortamos las cebolletas tiernas picando la parte verde blanda y la parte
firme la cortamos en cilindros de 3 cm.
Preparamos la salsa, mezclando los primeros 7 ingredientes en una olla
junto con la parte blanda de la cebolleta. Llevamos a ebullición, bajamos a
fuego lento y cocinamos 8 minutos.
Mezclamos la maicena con un poco de agua fría para formar una pasta y la
añadimos a la salsa, cocinamos 1 o 2 minutos más hasta que espese.
Dejamos enfriar. Untamos con salsa el pollo y dejamos marinar 30 minutos.
Formamos las brochetas doblando los pedazos de pollo y pinchándolos en los
palitos, alternando con la parte firme de la cebolleta.
Calentamos una sartén de fondo grueso y ponemos un poco de aceite.
Cocinamos las brochetas en grupos, 2 minutos por cada lado, después untamos con una brocha un poco de salsa y
vamos girando las brochetas cada 30 segundos durante 4 minutos o hasta que
estén bien cocidas.
Para la siguiente tanda limpiamos la sartén con papel de cocina y ponemos
nuevo aceite.
Servimos las brochetas espolvoreando las semillas de sésamo.
Esta exotica receta nos la ha pasado mi ex-compañera de Trabajo Núria. Es una amante de la comida japonesa.
¡¡¡Bon Profit!!!
Neus, Ester i Núria
¡¡¡Bon Profit!!!
Neus, Ester i Núria
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