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Bienvenidos a nuestra pagina de cocina super fácil. Somos tres mujeres catalanas, la iaia, la hija i la nieta, Neus, Núria, i Ester, muy aficionadas a la cocina. Tenemos fama de cocinar bien i muy a menudo los amigos nos piden alguna de nuestras recetas y a su vez nos pasan algunas de ellos, por eso nos hemos animado a compartirlas con todos vosotros. Son caseras, sencillas i aprovechando todos los productos semi-elaborados que nos ofrecen los comercios obtenemos los mejores y rápidos resultados.
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Benvinguts a la nostra pàgina de cuina superfàcil. Som tres dones catalanes, la iaia, la filla i la néta, Neus, Núria i Ester, molt aficionades a la cuina. Tenim fama de cuinar bé i molt sovint els amics ens demanen alguna de les nostres receptes i a la vegada ells ens en passen de les seves, per això ens hem animat a compartir-les amb tots vosaltres. Són casolanes, senzilles i aprofitant tots els productes semielaborats que ens ofereixen els comerços obtenim els millors i ràpits resultats.
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viernes, 22 de febrero de 2013

BOULEVANS - CANAPES RELLENOS DE ANCHOAS

Los Bolulevans rellenos de anchoa

BOULEVANS - CANAPES  RELLENOS DE ANCHOA

INGREDIENTES:

  • Anchoas en aceite de oliva
  • Huevo duro
  • Alcaparras
  • Mantequilla
  • Cebolla
  • Olivas rellenas
  • Bouvelans pequeños
ELABORACIÓN:

Cocemos el huevo, lo pelamos.

Los ingredientes, falta la cebolla
En un plato ponemos el huevo partido trozos, un poco de mantequilla, alcaparras partidas por la mitad, las anchoas troceadas, la cebolla cortada muy pequeña. 

Con la ayuda de un tenedor lo chafamos todo, removemos y hacemos una masa.


Cogemos una cucharita y vamos rellenando los Boulevanes.

Escurrimos unas olivas rellenas y coronamos con una oliva en cada Boulevand.

Haciendo la masa
Y ya esta, ya tan solo nos falta un buen Vermut o un buen Cava Rosado.

Quedan muy, muy buenos, lo único a tener en cuenta es la calidad de las anchoas.

Y si tienen muchas espinas o no.

Si es que No, perfecto.

Si es que SI, hay que armarse de paciencia y ir quitandolas antes de hacer la masa, ya que aparte de lo desagradable que es encontrarse con una espina mientras comemos tan ricamente, puede suponer un desastre en la mesa si a algún comensal se le clava alguna espinita en el paladar.

El comensal ahogandose, las abuelitas chillando, los niños aprovechando para levantarse de la mesa, y tu la o el cocinero en el centro de todas las miradas asesinas: ¡como no has visto que las anchoas estaban llenas de espinas!

¡¡¡Bon Profit!!!

Núria





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